martes, 26 de octubre de 2010

¿Son de verdad? Rusas calientes

Grushenka

La mejor de las novelas es bien dudoso que sea auténtica, es probable que no sea antigua y es posible que ni siquiera sea rusa.

La primera referencia cierta de Grushenka es en 1933, cuando se imprimió en Francia la primera edición en inglés de la obra. Según la leyenda se trataba de una obra traducida del ruso por un estadounidense radicado en Francia que sólo firma como J.D.

Según ésto, la traducción viene de la segunda edición de la obra en ruso, fechada en Kiev en 1879, y que fué escrito a partir de las confesiones extraídas de los archivos de la policía en Moscú y de otras fuentes y bibliotecas privadas. El libro llegó al autor a través de recomendaciones de intelectuales y artistas rusos, cuando en los años 30 el tal J.D. viajó con camaradas soviéticos para empaparse de la revolución de octubre.

El punto interesante es: no existe autor, ni fecha en que se escribió, no existen los archivos de la policía de donde se basó la novela, no hay año de edición de la primera impresión y nunca ha conocido la luz ningún original de las dos ediciones rusas, ni siquiera algún manuscrito. No hay constancia de que la obra haya existido.

Una hipótesis, tratando de creer en la palabra del joven J.D. es que haya sido víctima de una broma de sus camaradas, quienes le dieron un texto escrito o arreglado por ellos para hacerle creer que rescataba un clásico del erotismo. Yo soy más de la idea de que el joven J.D. necesitaba dinero para su estancia, así que hizo una obra muy del gusto de su público de Inglaterra, y muy acorde a sus ideas revolucionarias.


Memorias de una princesa rusa
Si yo tuviera que adivinar, pensaría que éste libro fué comprado hace poco tiempo en el puesto de la esquina y que fue escrito por la misma persona que escribe el "sensacional de ficheras". No aparenta ser una historia antigua, aunque de las cuatro, es la única que su existencia está documentada desde mediados del siglo XIX.

Si se trata efectivamente de un diario o está basado en él es otra historia. Katumba Pasha (nombre turco) era en realidad el alias de un ruso radicado en Inglaterra durante la guerra de Crimea (1854-1855). Según esto, existió un manuscrito original del diario escrito entre 1796 y 1800, que estuvo en propiedad de Pablo I, hijo de Catalina II la Grande, de su hijo Alejandro y de Nicolás y que estaba firmado por éstos tres emperadores como parte de su biblioteca privada.

Aparentemente, antes de la edición de Katumba Pasha, ya había sido editado el diario con otro nombre, con muchos menos detalles sexuales y mucha menos historia y coherencia. Según ésto llega Katumba Pasha como el gran salvador que obtiene permiso de estudiar el diario original en ruso (en una biblioteca de un palacio ruso) y hace una correcta traducción, para después reescribirlo en una forma literaria más simple de leer, llenando datos incompletos y dando explicaciones necesarias.

No creemos que la historia de ningún otro pueblo presente, en los tiempos modernos, una imagen de inmoralidad más completa y más odiosa que la del pueblo ruso bajo el reinado de la notoria Catalina. Ni las abominaciones de un Tiberio, ni las depravaciones de un Heliogábalo, ni las impuras tradiciones de la degenerada y degradada Roma, sobrecogen con mayor asombro». «San Petersburgo se había convertido en una segunda Babilonia... sí, diez mil veces peor que Babilonia en los desenfrenados excesos en que sus habitantes de todas clases -corte, nobleza y pueblo- se sumieron y se entregaron.

He escuchado decir a algunas personas que es la mejor novela erótica que existe; sin menospreciarla creo que no es el caso, para mí se trata de una obra, probablemente basada en otra anterior de pésima calidad, reescrita con un poco más de "picante" y un poco más de calidad, y cuyo fin era aumentar las bibliotecas de los erotómanos victorianos de Inglaterra.

Diario secreto de Pushkin

Todo indica que el diario de Pushkin es más falso que un político mexicano en la cámara de diputados, lo cual es mucho decir. Un judío ruso llamado Mijail Armalinsky emigra a Estados Unidos desde Rusia en 1975. Como tiene que vender su biblioteca, recibe y hace amistad con un hombre mayor llamado Nicolay Pavlovich, historiador. Pavlovich, luego de asegurarse que a Mijail le darán el permiso de emigrar, y que le permitirán llevar sus notas y poemas a través de la embajada de Holanda, le pide también que saque sus notas y manuscritos para ponerlos a salvo de la censura Rusa.

Según la leyenda, Pushkin escribió un diario de sus últimos meses y lo ocultó, a condición (¿a quién condicionó?, no se explica) de que no se abriera hasta pasados 100 años de su muerte. El diario que Pavlovich le pidió sacar de Rusia estaba traducido del francés al ruso por el historiador poco escrupuloso. Pushkin pudo bien haber escrito ese diario, definitivamente que en su vida fue impulsivo, libertino y erotómano; pero tratar de demostrar la autenticidad de un escrito por las críticas que ha recibido de los intelectuales rusos es un exceso de "sospechosismo".

En una historia de espías tipo guerra fría, el diario es intercambiado de manos para que llegue a salvo a Estados Unidos; pero su lectura se hace imposible por las premuras del viaje: Como la embajada holandesa  se negara a sacar los documentos, Mijail olvida intencionalmente su maletín en la oficina del cónsul, maletín que recibiría un año después en Estados Unidos. Mijail nos cuenta la frenética búsqueda que ha significado el diario para los historiadores, y la cantidad de asesinatos que se han dado por su culpa (¿?), pero nunca nos cuenta qué hay del siglo y medio de desaparición y su misteriosa aparición convenientemente mal traducida.

Un tiempo después, el manuscrito desaparece misteriosamente de su departamento, y sólo se queda con una copia que afortunadamente estaba oculta, y que publica finalmente en inglés en 1986.

Quizás tenemos un texto auténtico de Alexandr Pushkin. Quizás tengamos un intento de escribir y "ser como Pushkin", de algún anónimo admirador moderno. Quizás hablamos de una trampa editorial o una provocación literaria que ha causado algunas discusiones y escándalos.


Confesión sexual de un anónimo ruso
Según algunas mentes bienpensantes, Vladimir Navokov se inspiró en éste diario para su magnífico personaje en Lolita (Humbert). Se supone que el diario efectivamente procede de Ucrania, el idioma en el que se da a conocer (francés) se explica en el mismo libro....el francés era la lengua de los rusos acomodados, así que no hay porqué sospechar por ese lado.

Supuestamente el libro fué escrito a finales de 1912 por un ucraniano residente en Italia. Henry Havelock Ellis, sexólogo inglés recibió el relato directamente de su autor, precisamente como una confesión sexual que el sexólogo encontró interesante e incluyó en su estudio (Estudios de psicología sexual, 1926)

Al saber, por sus obras, que usted cree de provecho para la ciencia el conocimiento de ciertos rasgos biográficos referentes al desarrollo del instinto en algunos individuos, normales o anormales, se me ocurrió hacerle llegar el relato de mi propia vida sexual. Mi relato tal vez no sea muy interesante desde el punto de vista científico, pero sí tiene el mérito de ser de una exactitud y una veracidad absolutas ; es además muy completo

Quizás no se trate de una obra maestra del erotismo, pero es un interesante relato de las costumbres rusas de su época. Si se trata de una confesión o de una invención, eso sí quién sabe. Yo me quedo con la idea de que no se trata de un diario en el sentido estricto del término; yo creo que se trata de una autobiografía no muy verdadera de una persona que tenía una erotomanía curiosa.

Definitivamente el autor tenía atracción por los niños, y quizás el relato nos da luz del porqué. Definitivamente el autor no se siente a gusto con una parte de su vida, y al final concluye que todo es culpa de la masturbación. El autor está enfermo, si no, no vería un erotómano en cada niño, siempre tratando de seducirlo. Lo más extraño de todo es que el autor se dice agnóstico, y no tengo porqué dudar de esa afirmación después de haber leido el libro, entonces, la culpabilidad que siente no se explica, ya que no tuvo padres restrictivos ni una moral cristiana.

Si yo fuera psicólogo, éste sería uno de mis libros en la estantería.....el autor es un enigma, en el sentido amplio de la palabra.....pero como sólo soy un picateclas..............




Grushenka
Anónimo
Marzo 1978
La Sonrisa Vertical SV 5
ISBN: 978-84-7223-305-8
232 pág.


Memorias de una princesa rusa
Pasha, Katumba

Traducción: Cavandoli Menéndez , Margarita
Enero 1993
La Sonrisa Vertical SV 83
ISBN: 978-84-7223-651-6
168 pág.



Diario secreto de Pushkin
Pushkin, Alexandr Segeevich

Traducción: Olga Volkonskaya
EDAMEX, S.A. de C.V.
mayo de 1997
ISBN-968-409-930-4
176 pág.


Confesión sexual de un anónimo ruso
Anónimo

Noviembre 1991
La Sonrisa Vertical SV 76
ISBN: 978-84-7223-395-9
184 pág.

4 comentarios:

  1. A qué es interesante esto de las pesquisas sobre los textos eróticos, ¿no?, mi querido Lepis.
    Es en verdad apasionante ya que como piezas prohibidas (casi) todas tienen una historia detrás. Por el lado de los textos rusos esto que comentas es lo que he leído; que muchas de ellas sólo estaban encaminadas a venderse entre los ingleses victorianos ávidos de estímulos.
    Te recomiendo El erotómano, de Ian Gibson, que busca desentrañar la historia y develar al autor de My secret life by Walter, harto interesante y muy recomendable ya que pinta la vida de un burgués victoriano y los lazos que se tendían con otros ilustrísimos personajes del continente.
    Y por ahí en mi blog, y en la red, puedes rastrear la historia del famoso cuadro de Courbet El origen del mundo, que es sin duda muy singular.
    Ahora, como curioso de todas estas historias te pediría que incluyeras la ficha bibliográfica de los textos, para ayudarnos no sólo a formar un acervo de referencias válidas de estos textos, sino a facilitar su búsqueda y ubicar ediciones.
    Zas.
    Un fortísimo abrazo,
    Jorge

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  2. Sí, mucho les debemos a los victorianos locos; si no fuera por las prohibiciones, la literatura erótica sería my aburrida.
    Lo del libro de Gibson, lo compro nomás porque tu lo recomiendas, lo tengo ubicado en una librería de viejo donde he encontrado tesoros por unos míseros pesos.
    Ahora, por las referencias bibliográficas, puedo intentarlo; la verdad es que el desorden me gana, pero sí siento que obvié esa parte para facilitarme la vida........lo que sucede también es que quieres poner la referencia bibliográfica y te encuentras que quizás hay 10 distintas ediciones y me vuelvo loco como compulsivo que soy.

    ¿Conoces Open Library?:
    http://openlibrary.org/

    No te quiebres la cabeza, ellos ya hicieron la chamba.


    Saludos

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  3. Sí, mi buen Lepis, el de Gibson es buen libro, interesante, y si lo topas en las de viejo y barato, te vas a rayar. No da pa´l cochinómetro ni el perversómetro (salvo la portada de la edición de B, pero pa´nosotros es oro en paño)

    Ahora, de las referencias bibliográficas, me refería a las del libro que tienes en las manos, a ninguno otro, al que reseñas (de hecho eso nos hará notar número y fecha de edición. Verás que sorpresas te llevas)
    ... no pos si no está ca´on.

    Y no, no conocía Open Library, pero ahorita me meto.

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  4. The New French Edition of the Journal Secret 1836-1837, Alexander Pouchkine published by belfond.fr ISBN 978-2-7144-4858-3 just came out.
    (http://www.mipco.com/win/AllCovers.html)

    The Preface is written by Jean-Jacques Pauvert - the legendary publisher of Complete de Sade, Story of O, George Bataille, Andre Breton, Boris Vian and many others.

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