Los cuentos de Canterbury (1390) es un libro incompleto escrito antes de que la imprenta existiera. En la versión original 33 personajes contarán cuatro cuentos cada quien para completar un buen chingamadral de cuentos. Hasta nuestros días sólo ha sobrevivido una parte, por lo que ante la ausencia de un manuscrito no podemos saber si hubo una obra terminada alguna vez.
En el presente, existen 24 cuentos, algunos inconclusos o incompletos, la mayor parte con sus prologos y algunos con sus epílogos. Los cuentos están muy emparentados con las facecias y con los romances orales, en general es novedoso el libro por el tratamiento de personajes comunes: religiosos, seglares, decentes, pícaros, pobres y letrados.
El relato que contiene al resto del libro trata de varias decenas de personajes viajando a caballo en peregrinación a Canterbury. No se trata de una "manda" o de una penitencia ya que no están desgastándose ni en ayuno u oración...... si me preguntan mi impresión están todos de vacaciones.
El libro refleja personajes típicos del alto medioevo- temprano renacimiento, con personas de una incipiente clase media: molineros, estudiantes, una viuda, frailes, etc. Casi ninguno de los personajes tienen un nombre propio, mas bien son nombrados por su profesión. Esto es porque los personajes y el cuento que los contiene parece ser lo menos importante para el autor.
Casi todos los cuentos están basados en otras fuentes medievales, parece ser que solo un par de los cuentos sobrevivientes son originales de Chaucer. Lo encantador del libro es la trama que une a los cuentos, así, el molinero cuenta una historia sobre la seducción de la hija de un escudero, a lo que el escudero responde con un cuento sobre los cuernos de un molinero.
Por lo que se levantó y, sin hacer ruido, se acercó a la cuna, la cogió y sigilosamente la llevó al pie de su propia cama. Poco después, la mujer del molinero dejó de roncar y se despertó. Se fue a orinar, regresó y no encontró la cuna. En la oscuridad buscó a tientas aquí y allá, pero no la pudo localizar. «¡Dios mío! -pensó-. Por poco me equivoco y me meto en la cama de los estudiantes. Dios me proteja, pues me habría encontrado con un buen lío.»
Y siguió buscando hasta que localizó la cuna.
Entonces siguió tocando los objetos con las manos a tientas hasta que encontró la cama, pensando que era la suya, pues la cuna estaba junto a ella. No sabiendo exactamente dónde estaba, se introdujo en el lecho del estudiante. Se quedó quieta y se hubiese dormido si Juan, cobrando vida, no se hubiera echado encima de la buena mujer. Ésta pasó el mejor rato que había gozado en años, pues él la trajinó como un loco, entrando a por uvas con fuerza. Así fue cómo los dos estudiantes lo pasaron tan ricamente hasta bien avanzado el alba.
Por la mañana, Alano empezó a cansarse de tanto trabajo nocturno y susurró:
Adiós, dulce Molly; ya llega el día; no me puedo quedar más. Pero, por mi vida, que mientras viva y respire seré tu hombre, dondequiera que esté.
-Entonces ve, cariño, y adiós -dijo ella-; pero te diré una cosa antes de irte: cuando os marchéis a casa, al pasar frente al molino, detrás de la puerta, encontraréis un pastel hecho con dos arrobas de vuestra harina, que ayudé a mi padre a robar. ¡Que Dios te bendiga y te proteja, cariño!
Y al decir esto casi se puso a llorar.
Alano se levantó y pensó: «Me deslizaré dentro de la cama de mi amigo antes de que rompa el día.» Pero su mano tropezó con la cuna y pensó: «Dios mío, sí que estoy errado. Mi cabeza me da vueltas después del trabajo de esta noche, y por esto no sé caminar recto. Por la cuna, veo que me he equivocado de ruta. Aquí duermen el molinero y su mujer.»
Así quiso el diablo que el estudiante se metiera en la cama en la que dormía el molinero. Pensando que se metía al lado de su amigo Juan, se colocó al lado del molinero, le echó el brazo alrededor del cuello y dijo en voz baja:
-Tú, Juan, imbécil, despierta, por Dios, y escucha, ¡por Santiago! Esta noche he jodido a la hija del molinero tres veces, mientras tú has estado aquí hecho un flan, temblando de frío.
-¿Qué has hecho, bandido? -gritó el molinero-. ¡Por Dios que voy a matarte, mequetrefe, traidor! ¿Cómo te atreves a deshonrar a mi hija, ella que es de cuna tan noble?
Una de las partes más intrigantes del libro es el prologo y el cuento de la Comadre de Bath, una mujer curiosamente feminista, cuenta unos cuentos anticlericales de sexo y sobre el matrimonio. La mujer está descripta como una mujer lasciva, pero expone su punto de vista magistralmente y no es juzgada por nadie. Más adelante el clérigo dará su opinión sobre la penitencia, sin hacer burla o referirse a la Comadre.
Otro elemento curioso del libro es el Bulero, un personaje castrado o andrógino, imberbe, rubio y hermoso, aunque de voz aflautada.
Chaucer utiliza el inglés medio en lugar del latín o el francés; a semejanza de Boccaccio que utilizó el italiano en su obra. Así, nos damos cuenta de un cambio en algunos autores, que por primera vez se dirigen a audiencias menos eruditas.
La nobleza, el amor cortés, la religión, las ciencias, el matrimonio, la riqueza y otros aspectos de la vida humana componen el tema principal, aderezados de erotismo, moral y humor, como el Fabliaux o la Facecia indicaba que debía ser un relato.
El cuento del molinero es un clásico, el molinero es un desvergonzado pecador: toca la gaita, canta groserías, roba a sus clientes y cobra de más. Un par de hombres pasan a hacerle una visita y tienen relaciones con su esposa e hija, y le dan una paliza en venganza de su trato.
Una persona que se ofende por un cuento sobre su profesión, cuenta a su vez un cuento sobre la profesión de quien lo ofende, en un entramado muy divertido, sobre todo si tomamos en cuenta que, aunque los cuentos no sean originales de Chaucer, él es quien los arma en el orden particular que los hace tan divertidos.
Si quieren leer un resumen de los cuentos, les dejo esta liga.
En su tiempo, los cuentos de Canterbury fueron fuente de escándalo, reservado a unos pocos que podían darse el lujo de pagar por un incunable, el hecho de estar en verso y escritos en inglés les debe haber dado fama entre los juglares.
Es valioso porque el erotismo medieval es escaso, y éste libro es hoy materia de estudiosos.
Perversógrafo: Sexo vaginal, infidelidad, anticlericalismo, violación, homosexualidad, voyeurismo.
Cuentos Eróticos de Canterbury
Geoffrey Chaucer
Editorial Lectorum
Mexico, 2005
ISBN: 9707321067
110 pág
El libro no lo he leido, pero Passolini hizo una peli buenísima sobre ellos. Recomendable.
ResponderEliminarNo he visto las películas de Passolini......son varias, verdad?
ResponderEliminarRecuerdo que tiene la de Saló, basada en los 120 de Sade y ésta, o el decamerón,,,,,,,,necesito buscarlas
Lepis, estás haciendo un trabajo impecable. Aprovecho para preguntarte: ¿Cómo haces para incorporar esta función que te permite leer directamente los libros sin tener que descargar? Me gustaría agregarla a mi blog. Gracias.
ResponderEliminarJaja, gracias Rubén.......es sólo un entretenimiento que ya le queda poco tiempo snif, snif!......nahhhh, a ver cómo lo continúo.
ResponderEliminarLo de los libros en bien sencillo; desde Google Books, buscas un icono que parece una cadena y que dice "Enlazar", allí te aparecen dos opciones, la primera es un URL, por si quieres poner un vínculo, el segundo es un código de HTML, lo copias y lo pegas en el texto de tu blog.....es Todo.
En Slideshare es similar, pero el icono se llama "Embed", y en Scribd se llama "Incluir y compartir", buscas Incluir y copias y pegas el texto en tu Blog.
Luego dices en el blog que es algo muy complejo y que es secreto profesional y esas cosas jejeje
GRacias maestro
ResponderEliminarYo vi ésta y el decamerón y ambas me encantaron.
ResponderEliminar¿cómo que te queda poco? seguro que no, es cosa de tirar del hilo.
Le queda poco en su formato actual .... Ya veras, les va gustar un montón lo que sigue, y los literotismos actuales de vez en cuando también para seguirla
ResponderEliminaranda, que bien. Nuevos proyectos!
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