miércoles, 30 de mayo de 2012

La Creación de Manuel del Palacio (Fragmento)


LA CREACION
Invocación
¡Genios de la jodienda bienhechora,
espíritus sin fin de la impureza
que al coño de la virgen dais ardores
y al carajo del hombre fortaleza!
¡Sueños del adulterio protectores,
vértigos que turbáis nuestras cabezas,
a todos os invoco y os alabo
con la conciencia limpia y sucio el nabo!

Vamos a abrir al mundo en que vivimos
la peregrina crónica secreta,
y los santos misterios que leímos
a trocar en cuestiones de bragueta.
Vamos a revelar lo que aprendimos
en nuestra alegre juventud inquieta,
y a dar a la fricción y al disimulo,
a fuer de caballeros, por el culo.

Canto primero
En un hondo valle
donde sus dones prodigó natura,
de árboles mil la pintoresca calle
daba sombra y frescura:
y alegres ruiseñores
cantaban a compás sobre las flores

Allí el gentil granado
crecía al par de la frondosa higuera,
y el nogal elevado
y la altiva palmera
sus espesos ramajes confundían,
y al sol con su follaje oscurecían.

Del valle eran señores
dos seres nada más: allí la vida
les brindaba los goces seductores
que la inocencia anida:
y así sencillos, desnudos iban como dos chiquillos.

Jamás con vista fija
de Eva buscaba Adán las perfecciones
ni ella miró su pija,
que altiva se sentaba en sus cojones:
solo adornos ridículos
llamaban a la raja y los testículos.

Dichosa edad, dichosa
inocencia feliz!; tus goces bellos
nos brindan deliciosa
la calma que respiran todos ellos;
mas ¡ay!, que al fin perdida
nos mostró los abismos de la vida.

¿Por qué los dos jodieron?
¿por qué la puta de la vil serpiente
las almas inflamó? Placer sintieron
y en su entusiasmo ardiente
tanto les deleitó la putería
que pasaban jodiendo todo el día

mas Dios, con furia insana
castigar quiso su arrogancia fiera
y la fatal manzana
(o por mejor decir, la infausta pera),
males causó prolijos
que sufrieron los padres y los hijos.

Su voz atronadora
lanzó desde su asiento
y lleno de venganza aterradora
con su divino acento
a Eva y Adán maldijo,
y así con justa cólera les dijo:

“Decid, pillos, charranes
este es el premio de mi anhelo loco,
el pago a los afanes,
con que os he prodigado cuanto toco?
¡Estúpido trabajo!
No os debí dar coño ni carajo

Yo os adorné la vida
De la naturaleza con las galas,
Ventura en ella os ofrecí cumplida,
De mi cielo os abrí las antesalas,
Mas os prohibí una fruta
Y Eva de ella comió, ¡maldita puta!

Adán, eres un tuno,
Vete lejos de mí, ya no te quiero,
No seas inoportuno,
Que no me jode a mí ningún lechero;
Anda, vete con Eva
Y acábale de madurar la breva.

Mas antes de irte escucha
lo que voy a decir, porque es muy serio:
Tú conoces muy bien que la ira es mucha
y la merece a fe tu gatuperio;
os falta la conciencia
y voy a pronunciar vuestra sentencia.

Tú, maldita serpiente,
que eres la causa de tan cruda guerra,
andarás sobre el pecho eternamente
y será tu alimento la vil tierra;
odiarás la mujer por enemiga
y ella te pisará como una hormiga.

Tú, mujer, o demonio,
pues también eres digna de este nombre,
el yugo sufrirás del matrimonio
esclava siempre del poder del hombre;
te joderá cien veces,
y te darán dolores sus preñeces.

Y tú, gran puñetero,
pues seguiste el ejemplo de esa zorra,
cuando quieras comer, busca dinero,
que harto lograste aquí comer de gorra;
y sabe que a tu suerte
marcado tiene un término la muerte.

Ya os podeis ir, bergantes,
no os quiero ver ya más, ni aún en pintura;
os portasteis conmigo cual tunantes,
y a mi edad, ser cabrón, es cosa dura:
mucho bien os deseo
y ya sabréis de mí por el correo.

Esto dijo el señor: avergonzados
Eva y Adán oyeron sentencia,
y mudos, consternados,
la cumplieron con grande diligencia.
nunca a habitar volvieron el Edén
donde juntos armaron tal belén.

Fuera ya del recinto
del sagrado lugar, Adán gozoso
empinando una copa de lo tinto
a la mijer le dijo presuroso:
No es mi dolor profundo,
ánimo, y a joder, que ancho es el mundo.

Si el señor en su ira
nos arroja de aquí, vámonos presto
para gozar lo que mi afán delira;
tierra no ha de faltar, y esto supuesto,
quítate el taparrabo
y empuña alegre mi robusto nabo.

Placeres gozaremos
que nuestros males calmarán prolijos,
de aventuras mil disfrutaremos
siendo los padres de infinitos hijos;
tú has probado la fruta,
mujer que de tí nazca, será puta.

canto segundo

Luego que Adan, por su primer pecado,
escuchó del señor su voz tremenda
para andar mas a gusto y abrigado
compró un traje de majo en una tienda
y a su eva gentil llevando al lado
en una hermosa y apartada senda,
sin quitarse siquiera las polainas,
una tras otra le soltó diez vainas


De esta serie de polvos cotidianos
nacieron esas mil generaciones,
que del Señor cumpliendo los arcanos
poblaron de la tierra las regiones;
familia de alcahuetes y marranos
estúpidos los más, otros cabrones,
todos, en fin bergantes y asesinos
con hijos en montón adulterinos.

Hable si no la historia conocida
de Cain y Abel; hable del suceso


Manuel del Palacio. (1831-1906)

4 comentarios:

  1. Oh sí, espléndida!!
    ái te pido el nombre del libro, ¿sí?, pa´mi Vademecum (jeje)

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  2. Este solamente está editado en el Cancionero de Amor y Risa de Barbadillo, en su versión de Akal (1978, creo). La versión original del cancionaro no lo traía.

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  3. Ah! ´ira cómo gira.
    Lo voy a buscar en la edición que tengo del Cancionero ...,de Ediciones Espuela de plata (creo que 2007)
    Gracias.

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