miércoles, 13 de octubre de 2010

Grushenka, tres veces mujer

De las novelas rusas por presentar, la de mayor calidad literaria es "Grushenka, tres veces mujer". Ambientada en la Rusia de mediados del siglo XVIII, comienza con la narración de una sierva (trabajador casi esclavo) buscando a una mujer para comprarle a su ama, para que sirva de maniquí a los modistos.

La dama que necesitaba una nueva sierva era la princesa Nelidova, una mujer pobre que se casó con un frío hombre mayor, dueño de una considerable fortuna y de miles de siervos. Nelidova es malvada, cruel e insensible. La sociedad que nos presentan es de los primeros zares después de Pedro el grande, donde socialmente hay una gran brecha entre la rica nueva aristocracia y el pueblo que viven como esclavos.

Grushenka es una joven sierva con un parecido tan perfecto a Nelidova que hubiera hecho las delicias de los cuentos de Dickens. Grushenka es virgen, sumisa y costosa (unos 50 rublos, hablemos de una onza de plata por rublo) la adquieren y va a vivir a su nueva casa, donde es revisada, lavada, rasurada y desinfectada, para luego darle una paliza preventiva.

Encantada por su nueva vida, ahora tiene lujos (ajenos), come bien y trabaja poco, así que excepto por las frecuentes palizas y el hecho de que todos los modistos la manoseaban debido a su parecido con la princesa, su vida era mejor.

Nelidova, al ver que tenía una vulva más bella que la de ella, la hace desvirgar brutalmente para ver si con eso se deforma, pero para su sorpresa Grushenka sigue igual de bella. Entonces ordena que le pasen todos los siervos por encima cada noche para deformarla. Tanto Grushenka como los siervos son muy felices.

Nelidova, al ver que Grushenka no cambia con el sexo, la obliga a tener relaciones lesbianas con ella para humillarla, la golpeaba duramente, porque no sabía lamer correctamente o porque  el vestido no le sentaba correctamente con su borrachera, o por cualquier cosa.

Cuando Nelidova se casó con Alexei, le enseñó a tener relaciones con él: primero lo montaba de frente hasta que terminaba, luego lo excitaba de nuevo y lo montaba dándole la espalda; dedo en el culo mientras eyacula. Así de simple, frío y sin refinamientos. Nalgada y cada quien a su habitación; repetir tres veces por semana. Nelidova lo odiaba.

Nelidova propone a Grushenka que la sustituya en la cama, al fin que la oscuridad de la noche lo protegería. Ella acepta contenta porque es sumisa, porque el sexo le encanta (y porque tampoco tenía opciones) Ella es tan sensual que el trato le gusta a Alexei, a Grushenka, a Nelidova y al amante de ella.

Un buen día, Alexei descubre la mentira y se siente engañado, toma a Grushenka y la tortura en el calabozo para que confiese. Luego va por Nelidova y la desnuda al lado de Grushenka, también es terriblemente torturada hasta quedar en carne viva. Mata al amante y huye al extranjero.

Deja a su inepto sobrino a cargo y repudia a su esposa. A Leo le divierte el parecido se Grushenka con su tía, así que la toma por el único agujero que el tío no había usado, y luego se olvida de ella y termina alquilándosela a una alcahueta que buscaba carne fresca para su burdel.

Grushenka escapa con dos jóvenes que le dan aventón (y se la cepillan) Grushenka se enamora perdidamente de Mijail, uno de ellos y no lo olvida en muchos años.

Llega a Moscú a vivir con una amiga, quien le ofrece un trabajo como costurera. Laura, la empleadora en realidad tenía un negocio paralelo a la costura; se dedicaba a alquilar los cuerpos y principalmente las bocas de algunas de sus pupilas, así que al descubrir que Grushenka no era mas que una prófuga decide deshacerse de ella vendiéndola.

Grushenka logra huir de nuevo y se emplea como sirvienta en una casa de baños, donde convence al dueño gracias a su fino arte de mover la colita:

Obedientemente, le rodeó otra vez la espalda con las piernas, aún más arriba, de modo que casi le tocaba los hombros con los talones... y su pito se deslizó nuevamente hacia el interior, de motu propio. Ella le agarró la cabeza con las manos y la inclinó hacia abajo, él sintió que se le escurrían los pies y pronto quedó completamente recostado encima de ella, quien, por lo tanto, podía menear mejor las nalgas por debajo de él. Entonces ella se arqueó y, llevando hacia abajo su mano derecha, cogió sus bolsas de néctar: empezó a acariciarlas y sobarlas suavemente, haciéndole cosquillas al mismo tiempo dentro de la oreja con el meñique de su mano izquierda.
Brenna metió la mano derecha bajo las nalgas de ella — tenía tan grande la mano que podía abarcar ambas al mismo tiempo — y empezó a moverse lentamente. Introdujo su cetro tan profundamente que le llegó hasta la matriz, se retiró lentamente y volvió a empujar;ella movía circularmente sus nalgas con los ojos abiertos; tenía conciencia de cada movimiento y eso le permitía prestar su más amplia colaboración.
Cuando él se sintió realmente excitado, se olvidó de todo;se puso de pie, cerca de la cama y le levantó las nalgas de tal modo que la cabeza y los hombros de ella apenas rozaban las sábanas. Sosteniéndola por las caderas, no les unía más que el contaco de Príapo con el monte de Venus, y le hizo el amor con toda su fuerza.
Cuando el hombre llegó al orgasmo, sintió que un chorro caliente se esparcía dentro de ella, y, aun cuando resulte extraño, ella también gozó otra vez.

Los baños eran un lugar de diversión de hombres y mujeres de la naciente clase media, había chicas desnudas para darte masajes, para bañarte o para que les compraras el cuerpo, el tiempo y el cariño. Los establecimientos eran para hombres el el primer piso, con servicio de bar; y para mujeres en el segundo piso con servicio de té, mamadas y galletitas.

Allí, Grushenka gana su dinero y es libre por las tardes. Claro, había clientes aburridos, clientes cansados, clientes que te metían el dedo y te pedían que se los lamieras, clientes a los cuales masturbar con los pies, clientes que te nalgueaban....todo tipo de locos.

Un día la pesca la esposa del patrón en plena faena con el susodicho y la pasan a los baños de mujeres. Allí descubre la mezquindad de las mujeres, quienes dan malas propinas, nunca se preocupan por ella y le hacen la vida imposible.......además; no había vergas.

Bueno, para verga la del patrón, así que un día vuelve a la jodienda y es atrapada infraganti. Huye de nuevo con Martha. Se deja vender por Laura, la costurera, quien la vende a un tipo muy extraño por cien rublos.

El angelito que la compra es un malvado y cruel personaje a quien sólo tiene amor por el culo de las chicas y por el dolor ajeno. Sergio era un malvado siervo que se había hecho capataz, y que en la vejez de su amo se había apropiado de la hacienda y despilfarraba el dinero de su amo, ahora postrado en la cama, encerrado y torturado por Sergio.

Sergio era amante de traseros por convicción y por tendencia. Ante todo, no quería que sus muchachas quedaran embarazadas; además, encontraba que la parte trasera era más pequeña y estrecha. Finalmente, no quería satisfacer a las chicas; quería todo el placer para sí y prolongar su diversión a su antojo sin ayuda de su pareja. Por lo tanto, la cabeza de la verga de Sergio estaba ahora bregando por penetrar en Grushenka... por detrás. Empujaba, luchaba, se retorcía;a ella le dolia, aunque no fuera la primera vez;el príncipe Leo había inaugurado aquel orificio y más de un dedo lo había penetrado y frotado desde entonces. Pero Sergio no empleaba ungüentos, ni dirigía o ayudaba con la mano, mientras ella gemía y gruñía bajo su ataque prolongado. El hombre tenía práctica; sabía que el músculo que cerraba aquella puerta estaba arriba y lo ablandó con su presión; el músculo cedió y su verga entró entera.
Al tenerla dentro, se detuvo un instante, se puso cómodo y emprendió un movimiento lento de adentro afuera. Grushenka, echando una mirada por entre sus piernas hacia los muslos fuertes, morenos y peludos y la punta de la verga que aparecía y desaparecía, quiso ayudar un poco y movió las nalgas. Pero Sergio la golpeó en un muslo y le ordenó que se estuviera quieta. Ella sintió que el instrumento aumentaba y aumentaba; sentía como si fuera a defecar. Recorrió sus ingles una extraña sensación a medida que se prolongaban los minutos. Las demás muchachas estaban sentadas alrededor, cuchicheando. Finalmente Sergio llegó al orgasmo sin apresurar sus movimientos;no sacó la verga al terminar, sino que se quedó allí parado, esperando, hasta que el pito se achicó, se ablandó y salió solo. Entonces abandonó el cuarto sin decir palabra......
— Por lo general, pone en línea a tres o cuatro, nos hace agacharnos como tú antes, y va de una a otra.
— Ten cuidado y no te muevas; cuando llega demasiado pronto a su objetivo te da una paliza hasta hacerte sangrar.
— Y no pongas ungüento en tu hendidura. Quiere forzar la entrada y detesta entrar con facilidad.

Sergio quiere minar la salud física del amo, así que hace que Grushenka lo visite con las tetas de fuera. Ella ayuda al viejo a enviar un recado a sus familiares y es rescatado. A cambio gana su libertad, una recompensa y se queda a trabajar en la casa como gobernanta.

Al tener el poder, Grushenka se convierte en una cruel mujer, a quien le gusta golpear y matratar a la gente a su cargo; ya no es esa sumisa sierva que se dejaba golpear, sino esa cruel ama que impone su castigo. Un día se reencuentra con Mijail y huye con él. Viven una luna de miel hasta que el padre de Mijail la destierra de Rusia con una fortuna.

Viaja por Europa, derrocha el dinero, quiebra a varios amantes, se hace alcahueta. Hasta que a los 27 años decide regresar a Moscú, donde el mismo día que llega es encarcelada, violada y torturada. Con el tiempo, se gana los favores del malvado capitán de la cárcel, con lo que evita el ser mercada en la cara con el hierro, el destierro a Siberia, la carcel de prostitutas, el calabozo de torturas, etc. Ahora es la cocinera y casi esposa del capitán y la torturadora oficial de la cárcel......todo una ascenso.

Con el tiempo, roba una fortuna al capitán y lo convence de que le permita abrir un burdel, a cambio él tendría todas las prostitutas que quisiera. El le permite hacerlo con tal de que se vaya. Ella compra una casa elegante, compra 15 siervas y hace una fiesta aristocrática que se sale de control y deviene en una orgía de 200 hombres contra 15 mujeres, donde las chicas son desvirgadas por el  público como parte de la rifa/espectáculo, luego son violadas analmente por la turba. Grushenka termina como la más famosa alcahueta gracias a los escándalos de esa noche.

Nos quieren vender Grushenka como la Fanny Hill rusa; en todo caso para mí se trata de la Dolly Morton rusa, por la cantidad de flagelación y tortura que el libro describe.


Perversógrafo: Sexo vaginal, oral, anal, entre las tetas, flagelación, sadismo, masoquismo, fetichismo de pies, coprofagia, juguetes sexuales, azotes, lluvia dorada, esclavitud, sumisión, lesbianismo, masturbación, beso negro, violación, seducción, prostitución, dedo-ano, lengua-testículo, voyeurismo, exhibicionismo, y como se llame meter la propina por el coño.




Grushenka, tres veces mujer

1 comentario: